Cuando por allá 1998 se empezó a diseñar lo que debía ser la cuarta generación de telefonía móvil no imaginaban que se acelerase tanto el proceso. Ericsson, por ejemplo, defendía en 2004 que la telefonía 4G empezaría en el 2012, (¡eHui!) mientras que la mayoría de expertos vaticinaban el 2020 como fecha de consolidación.
Sin embargo, casi está por aterrizar. Ya se han hecho las primeras pruebas, especialmente en Japón, con resultados de lo más positivo: nada menos que 1 Gigabit por segundo, y 100 Megabits por segundo en un vehículo moviéndose a 20 Km/h (han llegado a los 5 Gbps según recoge Kirai) aunque en realidad la previsión no supera los 20 Mbps en una primera fase de implantación. Japón (con un parque móvil 3G que se acerca al 80 %) no es el único país embarcado en el desarrollo de telefonía 4G. La compañía norteamericana Sprint está invirtiendo miles de millones de dólares en la construcción de una red WIMAX (algo así como un WiFi más rápido y de mucha mayor cobertura), en la que por cierto también quiere participar Google. Parece que la red estará operativa para ofrecer servicios 4G en Chicago, Baltimore y Washington a finales de este mismo año.
La cuarta generación de telefonía consiste, además del aumento espectacular en la velocidad de transferencia, en la continuidad comunicativa conseguida gracias a la compatibilidad de cualquier tecnología, todas ellas puestas bajo el protocolo IP. No importa en qué zona estés o a a través de qué radiofrecuencia se establezca la conexión: se puede pasar de una a otra sin cortes ni interrupción. Por supuesto, otro efecto secundario será el incremento exponencial en la capacidad de almacenamiento de los terminales 4G para poder guardar los enormes archivos que podrán transferirse, en un escenario que supondrá la gratuidad de las llamadas de voz y una tarifa plana barata para las comunicaciones de datos.
La tecnología HSDPA que ya incorporan algunos terminales puede considerarse la fase preliminar de 4G, todavía sin nombre porque es más bien un conjunto de tecnologías y protocolos convergentes gestionados todos por IP.
La Unión Internacional de Telecomunicación (UIT) la denomina IMT-Advanced y está trabajando en la dediniciónde sus especificaciones (OIM)
Cuando por allá 1998 se empezó a diseñar lo que debía ser la cuarta generación de telefonía móvil no imaginaban que se acelerase tanto el proceso. Ericsson, por ejemplo, defendía en 2004 que la telefonía 4G empezaría en el 2012, (¡eHui!) mientras que la mayoría de expertos vaticinaban el 2020 como fecha de consolidación.
Sin embargo, casi está por aterrizar. Ya se han hecho las primeras pruebas, especialmente en Japón, con resultados de lo más positivo: nada menos que 1 Gigabit por segundo, y 100 Megabits por segundo en un vehículo moviéndose a 20 Km/h (han llegado a los 5 Gbps según recoge Kirai) aunque en realidad la previsión no supera los 20 Mbps en una primera fase de implantación. Japón (con un parque móvil 3G que se acerca al 80 %) no es el único país embarcado en el desarrollo de telefonía 4G. La compañía norteamericana Sprint está invirtiendo miles de millones de dólares en la construcción de una red WIMAX (algo así como un WiFi más rápido y de mucha mayor cobertura), en la que por cierto también quiere participar Google. Parece que la red estará operativa para ofrecer servicios 4G en Chicago, Baltimore y Washington a finales de este mismo año.
La cuarta generación de telefonía consiste, además del aumento espectacular en la velocidad de transferencia, en la continuidad comunicativa conseguida gracias a la compatibilidad de cualquier tecnología, todas ellas puestas bajo el protocolo IP. No importa en qué zona estés o a a través de qué radiofrecuencia se establezca la conexión: se puede pasar de una a otra sin cortes ni interrupción. Por supuesto, otro efecto secundario será el incremento exponencial en la capacidad de almacenamiento de los terminales 4G para poder guardar los enormes archivos que podrán transferirse, en un escenario que supondrá la gratuidad de las llamadas de voz y una tarifa plana barata para las comunicaciones de datos.
La tecnología HSDPA que ya incorporan algunos terminales puede considerarse la fase preliminar de 4G, todavía sin nombre porque es más bien un conjunto de tecnologías y protocolos convergentes gestionados todos por IP.
La Unión Internacional de Telecomunicación (UIT) la denomina IMT-Advanced y está trabajando en la dediniciónde sus especificaciones (OIM)
nota original y mas informacion aqui
jueves, 2 de agosto de 2007
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