Celulares ¿Paramos o seguimos?

Caso I: Sala Martín Coronado del Teatro Municipal San Martín. Estreno de “Un enemigo de pueblo” de Henrik Ibsen dirigida por Sergio Renán. La voz grabada de la locutora Betty Elizalde anuncia, antes de comenzar la función y entre otras cosas, que apaguen los teléfonos celulares o de radio llamadas. Mitad del primer acto suenan tres teléfonos celulares, el director de la obra –CT se hallaba en la misma fila del director- bufa e insulta. Intervalo. Comienza el segundo acto al promediar el mismo vuelven a sonar dos teléfonos celulares, ya el director luego del insulto jura que si los llega a identificar los mata.

Caso II: Teatro Belisario Club de Cultura. Función regular de la obra “Suerte” con dramaturgia, dirección y actuación de Marcelo Savignone. Momento sumamente emotivo de la obra, suena un celular que es atendido e inmediatamente la receptora de la llamada entabla un diálogo sin importarle lo que sucede en escena, el diálogo telefónico continúa mientras es sacada de la sala por una asistente del teatro. El actor Marcelo Savignone improvisa una situación para insultar con todas las letras.

Caso III: Teatro Anfitrión. Función regular de la obra “Mar de Ajó”. Al entrar a la sala a medida que se cortaban las entradas se decía que apaguen los teléfonos celulares. Ya dentro en la pequeña y cálida Sala Verde sucede un clima muy íntimo de la obra, la pegadiza “música llamada” de un celular perjudica dicho clima.

Caso IV: Teatro Del Artefacto. Función estreno de “Her Klement”. Antes de comenzar la función y con todo los espectadores dentro de la sala, el director Alejandro Ullua luego de unas palabras de agradecimiento, pide que se apaguen los teléfonos celulares o aparatos de radio llamadas. A mitad de obra dentro de un cruce tenso de dos actores suena nítidamente un teléfono celular.

Estos son sólo cuatro casos de los muchos que el aparato celular incide en un hecho teatral.

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